Recomendado de Eduardo Muñoz,
Director del MBA de PRIME Business School – Universidad Sergio Arboleda
El blockchain o cadena de bloques, es una nueva y revolucionaria tecnología. Se define como una base de datos que arroja una cantidad creciente de historiales ordenados. En el artículo Breve historia de ‘blockchain’ y el largo futuro que nos espera juntos, publicado por Harvard Business Review (marzo 2017), el autor Vinay Gupta introduce el tema, cuenta los usos de esta tecnología y describe el camino a recorrer para su implementación.
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El primer uso de blockchain fue la creación de Bitcoin o el sistema de moneda virtual y el descubrimiento que esa misma tecnología se podía utilizar en cualquier tipo de organización para ejecutar transacciones. Otro uso relevante fue lo que se llamó “contrato inteligente”, en la plataforma Etherum, que sirvió para crear otros tipos de instrumentos financieros online. Las pruebas de participación o de trabajo, son otro uso de esta tecnología y actualmente son tendencia; en estas, los grupos de mayor potencia computacional (conocidos como mineros) manejan más centrales de datos proporcionando seguridad y exigen una criptomoneda como medio de pago. La innovación más reciente es la cadena de bloques escalada, que se enfoca en identificar el número de computadores requerido para validar una transacción y procede a dividir efectivamente el proceso entre ellos sin disminuir el nivel de seguridad.
La tecnología blockchain pronostica una importante disminución en los costos de transacción y, sin duda, cambiará procesos en los sistemas e impactar al nivel que lo hizo el comercio electrónico al final de los años 90. Aunque el camino futuro es difícil de adivinar, no hay duda que los cambios generados influirán en diversos ámbitos, desde distribución hasta redes sociales; inclusive, temas de propiedad del Estado podrán gestionarse bajo esta tecnología.