La transferencia de Neymar del Barcelona al Paris St. Germain, y el enorme pago hecho por este, son temas que al día de hoy siguen generando polémica. La lucha por una justa descentralización de los ingresos en el fútbol, ha sido la primera bomba en explotar por parte de los pequeños clubes. Pero ahora los grandes equipos han encendido la mecha de una segunda problemática: el juego injusto de los enormes costos de los fichajes.

Desde el Liverpool, e inclusive desde el Barcelona (equipo con el que el PSG firmó el contrato de transferencia de Neymar), han amenazado con denunciar a ese equipo ante la UEFA, por quebrantar la leyes FFC (Juego Financiero Justo). El objetivo esencial de estas reglas era evitar que los clubes acumularan demasiada deuda y sus dueños les inyectaran demasiado dinero.

La mencionada situación se considera injusta en el caso del PSG debido a que el club está en una condición en la cual puede gastar solo 30 millones más de los que gana, con lo que al parecer habría unos descuadres ilógicos en sus libros contables. Gastos como mejoras en estadios, desarrollo de jóvenes y equipos femeninos son avalados por la UEFA, pero en este caso hay contratación de nuevos jugadores por valores cercanos a 220 millones de euros y desembolsos anuales por cláusulas de 40 millones de libras. Estas cifras, obviamente, superan la condición básica establecida por las FFC. Inclusive, una preocupación enorme entre las personas ajenas al club es cómo se compensa esto en la contabilidad; la explicación dada es el enorme aumento en las unidades vendidas de camisas del equipo, gracias a la transferencia de Neymar.

Esta polémica se centra no solo en las FFC sino, inclusive, en los principios que se aplica en las altas esferas del futbol. La preocupación se da no solo entre los pequeños sino también entre los equipos más grandes.

Para conocer más acerca de las FFC y la polémica tras la contratación de Neymar, visite: http://www.bbc.com/news/business-40814333