La Universidad Sergio Arboleda recibió la Orden al Mérito Policarpa Salavarrieta en el Grado Oro, máxima distinción de la Asamblea Departamental de Cundinamarca, conferida a entidades, organismos y ciudadanos colombianos que han ejercido una labor significativa en el departamento. Este reconocimiento exaltó los 40 años de excelencia académica, compromiso social y contribución al desarrollo del país por parte de la Universidad.

Jorge Noguera Calderón, rector de la Universidad Sergio Arboleda, fue el encargado de recibir las insignias en el recinto de la Asamblea el pasado 18 de junio. El evento estuvo encabezado por José Ricardo Porras, presidente de la Asamblea Departamental de Cundinamarca; Jorge Emilio Rey Ángel, gobernador de Cundinamarca; Nancy Patricia Gutiérrez, diputada organizadora; y la Mesa Directiva de la Asamblea. Asimismo, en la condecoración participaron vicerrectores y directivos de la Universidad Sergio Arboleda, diputados y demás invitados especiales.

Jorge Emilio Rey Ángel, gobernador de Cundinamarca, señaló en su intervención valores fundamentales en el proceso de formación de la Universidad: idoneidad, ética y creatividad. “Con su enfoque ético, hacen que la institución se distinga no solamente por entregar conocimientos a sus profesionales, sino también cómo este se utiliza en beneficio de los demás… si alguien me preguntara cuál es la universidad que mayores capacidades tecnológicas hoy dispone, para los procesos de formación profesional en Colombia, sin duda, llega a mi cabeza la Universidad Sergio Arboleda”, aseguró Rey.

A su turno, Jorge Noguera Calderón, rector de la Universidad Sergio Arboleda, indicó que “en los últimos años, la relación entre la Universidad Sergio Arboleda y el departamento de Cundinamarca ha sido un ejemplo de cómo la colaboración entre la academia y el sector público puede producir frutos concretos. Aquí hemos encontrado aliados dispuestos a dialogar, a innovar y, sobre todo, a creer que el futuro se construye con decisión desde las aulas, desde los territorios y desde las comunidades”.

En su discurso, José Ricardo Porras, presidente de la Asamblea Departamental de Cundinamarca, hizo énfasis en el aporte de la Universidad al conocimiento de los cundinamarqueses. “La Sergio es una universidad prestigiosa, que se ve reflejada en los estudiantes que allí han estado, en las diferentes áreas del conocimiento, es por lo que, nos honra hacer entrega de este importante reconocimiento. Esperamos continuar activamente con el propósito de afirmó Porras.

Por su parte, Nancy Patricia Gutiérrez, destacó la importancia del enfoque humanista de La Sergio. “Colombia necesita educación desde y para el territorio, que forma, pero, también cuida, acompaña y proyecta. Una educación que conecta el bienestar, salud mental, empleabilidad y emprendimiento. Una institución que transforma, entiende que formar profesionales fortalece comunidades y genera desarrollo”, explicó la diputada.

La condecoración reconoce el liderazgo institucional de la Sergio Arboleda, su vocación humanista, ética e innovadora, reflejada en una amplia oferta académica en modalidades presencial, virtual e híbrida. Además, por su presencia nacional, con sedes en Barranquilla y Santa Marta, e internacional, a través de alianzas estratégicas con universidades de Estados Unidos y España, y misiones académicas a China.

Esta máxima distinción es reflejo de una amplia trayectoria institucional, desde su fundación en 1984, con hitos como el lanzamiento del satélite Libertad 1, la creación del Observatorio Astronómico y el Planetario, el proyecto Talento Tech, desarrollado junto con el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), la consolidación de PRIME Business School, con acreditación internacional, entre otros logros destacados.

La Universidad Sergio Arboleda reitera su compromiso con Cundinamarca y su gente, con la formación de ciudadanos con criterio, profesionales con vocación de servicio y líderes que entiendan que el conocimiento no se acumula: se comparte, se multiplica y se pone al servicio del bien común.


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