CERTIFICACIÓN DEL CURSO DE LENGUA DE SEÑAS: UNA CELEBRACIÓN DE INCLUSIÓN
Estudiantes del curso Introducción a la Lengua de Señas Colombiana recibieron su certificación tras ...
En 1984, nació la Universidad Sergio Arboleda, una institución que, a lo largo de sus 40 años, ha formado personas integrales, globales, emprendedoras y transformadoras. Este proyecto académico, fundado por Rodrigo Noguera Laborde, jurista, escritor y filósofo, y Álvaro Gómez Hurtado, abogado, periodista, miembro de la Cámara de Representantes y senador, se caracteriza por sus pilares fundamentales: el humanismo, la excelencia académica, la internacionalización, y el emprendimiento e innovación.
“Hoy, 40 años después de nuestros primeros pasos, reafirmamos nuestro compromiso con los ideales de nuestros fundadores. Seguiremos formando profesionales competentes y ciudadanos íntegros, personas capaces de liderar con ética y con un profundo sentido de responsabilidad hacia el otro. La Universidad Sergio Arboleda seguirá siendo, como lo soñó Rodrigo Noguera Laborde, un faro de luz y conocimiento”, señala Jorge Noguera Calderón, rector de la Universidad Sergio Arboleda.
En ese camino, la Universidad ha recibido múltiples reconocimientos y se ha posicionado en Colombia como una de las mejores. Así, con apenas 30 años desde su fundación, en 2015, La Sergio recibió la Acreditación Institucional de Alta Calidad por parte del Ministerio de Educación Nacional, lo que la convirtió en la universidad más joven del país en obtener este reconocimiento.
“El proyecto de La Sergio tiene un propósito claro: formar profesionales con perfiles específicos. Los fundadores deseaban que sus egresados fueran profesionales integrales, altamente calificados en su disciplina y con una sólida cultura. Para la Universidad, siempre ha sido fundamental contribuir al país con buenos ciudadanos”, expresó Germán Quintero Andrade, vicerrector de Crecimiento y Calidad, quien se unió a esta Casa de Estudios hace 33 años como docente, y tres años después, en 1995, asumió el cargo de primer Vicerrector Académico de la Institución.
Por su parte, Mauricio Rey Torres, vicerrector Académico, destaca que la Universidad ha construido un enfoque que fomenta, ante todo, el humanismo como uno de sus pilares fundamentales para el desarrollo integral de sus estudiantes. Además, motiva a los Sergistas a trascender en cada acción con resiliencia, pasión y conocimiento.
“Los egresados Sergistas siempre impulsan la excelencia académica y defienden los valores humanistas. Considero que el legado de esta Institución corresponde a la transformación que queremos para la sociedad a través de todos los saberes que se han adquirido y desarrollado a lo largo de los 40 años de historia, afirmó el Vicerrector Académico, quien llegó a la Institución hace 10 años.
Gracias a los Sergistas que, con dedicación, compromiso y calidad humana, contribuyen cada día al fortalecimiento del proyecto académico y a la transformación, La Sergio reafirma su compromiso de educar personas íntegras en diversos ámbitos, que abarcan desde las artes y la cultura hasta el derecho y la tecnología. Este enfoque integral refleja los legados imprescindibles que, según Víctor Malagón Basto, vicerrector de Relaciones Institucionales, ha dejado la Institución a lo largo de sus 40 años de historia.
“La Sergio ha demostrado valentía ante grandes retos. Quiero destacar el liderazgo y la resiliencia con los que ha enfrentado cada desafío. La Universidad ha logrado establecer un vínculo en el corazón de sus egresados a través de las pequeñas experiencias que se viven día a día”, mencionó el vicerrector, quien inició su labor como profesor en La Sergio en 1998.
Los cimientos de la Universidad fueron forjados por humanistas que, además de contribuir a la sociedad, apostaron al inicio de un proyecto académico Sergista. Algunos de ellos fueron Ramón Bulla Quintana, quien dictó la primera clase impartida en la Institución.
“Desde la proyección de una nueva universidad, sus gestores tenían muy claro que esta no podría ser una más, sino una completamente diferente, que tuviera como objetivo no solo la formación de idóneos profesionales, sino sobre todo de personas cultas, es decir, de seres humanos intelectualmente y moralmente íntegros, responsables, honestos, de vida intachable y conducta ejemplar”, expresó en un discurso el maestro Bulla Quintana, quien se desempeñó como decano de la Escuela de Filosofía y Humanidades de la Sergio Arboleda y fue alumno de Rodrigo Noguera Laborde y Álvaro Gómez Hurtado.
Otro docente Sergista fue Raimundo Emiliani Román, quien, además de haber sido un importante jurista, se desempeñó como ministro, congresista por más de 20 años, miembro de la Asamblea Nacional Constituyente de 1991 y embajador de Colombia en Suiza, Brasil, La Habana, Montevideo, la Santa Sede y la Organización de las Naciones Unidas. También fue docente de Derecho de La Sergio.
Por su parte, Gregorio Rodríguez Vázquez dejó una huella imborrable en la Universidad. “La docencia es hermosa; el intercambio con la juventud, sobre todo a mi edad, resulta muy vivificante. Poder transmitir conocimientos y, sobre todo, formar la ética y moral del individuo, es muy satisfactorio”, afirmó el docente, quien inculcó el valor del carácter y la determinación en las tres décadas que dedicó a la Institución.
Además de estos destacados docentes Sergistas, la Universidad contó con otros profesores juristas como Santos Garavito Acosta, Ciro Alfonso Lobo Guerrero, Carlos Murcia Montoya, entre otros, quienes, al creer en la visión de los fundadores, aportaron de manera significativa a la excelencia académica y reafirmaron su compromiso de egresar ciudadanos ejemplares.
El proyecto académico inició en Bogotá con la Escuela Mayor de Derecho y la Escuela de Filosofía y Humanidades, eje y complemento de la formación humanística. “Educar no solo consiste en instruir, sino también en formar una personalidad”, expresó Rodrigo Noguera Laborde en los albores del proyecto educativo.
Posteriormente, con el objetivo de extender la formación humanística y ofrecer una Universidad de gran calidad en la ciudad natal de Rodrigo Noguera Laborde, La Sergio abrió sus puertas en Santa Marta en 1994.
“La experiencia de haber trabajado con el fundador de la Universidad contribuyó a afianzar y profundizar el sentido de los valores que nos hacen ser comunidad, dado el compromiso y la defensa del humanismo integral que siempre profesó el doctor Noguera Laborde. Esta Universidad es mi segunda casa. Sin duda, el legado de esta Institución y de los Sergistas se basa en el profesionalismo y el alto nivel de calidad”, enfatizó María Stella Rodríguez Molina, coordinadora Académica del MBA de PRIME Business School, quien ha dedicado 33 años de trabajo a la Institución.
A lo largo de la historia de la Universidad, muchas personas han compartido gran parte de su vida profesional y personal. Una de ellas es Gloria Rodríguez Pinzón, quien estudió en La Sergio Filosofía y Humanidades y Licenciatura en Filosofía y Letras, sin imaginar que luego ejercería la docencia y posteriormente ocuparía el cargo de vicedecana de la Escuela de Filosofía y Humanidades.
“Desde sus inicios, la Universidad ha sido consecuente con su propósito de incidir e impactar como un potente agente de cambio y transformación social y cultural. Esto se logra a través de la educación, una herramienta poderosa que cambia mentalidades y concepciones. Nuestra educación es receptiva no solo al desarrollo técnico y científico, sino también al crecimiento humano y formativo”, expresó Gloria Rodríguez Pinzón quien cumplió 30 años de trabajo en su alma mater y actualmente es directora del área de Filosofía y Humanidades.
Marta Reyes Gutiérrez, directora médica del Servicio Médico, quien este año también cumplió 30 años de labores en la Institución, subrayó que La Sergio ha sido su segunda casa y le ha brindado oportunidades de crecimiento. Además, destacó los beneficios que la Institución ofrece a sus colaboradores, como descuentos para que los familiares de los Sergistas puedan estudiar.
“Gracias a esta academia he crecido personal y profesionalmente. El legado de esta casa de estudios es que cada miembro de la Comunidad Sergista crezca como persona, con el fin de contribuir a una sociedad excelente”, destacó la Directora del Servicio Médico.
Con el inicio de un nuevo siglo, la Universidad apostó por el desarrollo científico y tecnológico e inauguró el Observatorio Astronómico, equipado con un telescopio computarizado, un salón planetario y herramientas para la enseñanza didáctica de los conceptos básicos de la astronomía. Siete años después, en este lugar se desarrolló el primer satélite colombiano en órbita: el Libertad 1, diseñado y programado por un grupo de investigadores de la Universidad.
En 2001, se estableció el Instituto de Estudios y Servicios Ambientales (IDEASA), un centro de pensamiento que promueve la investigación, la formación, la docencia, la gestión ambiental y la proyección social, bajo un marco operativo local, nacional e internacional.
Mauricio Uribe Blanco, presbítero y decano de la Escuela de Humanidades y Ciencias Sociales, señaló que la formación integral ha sido un sello distintivo de la Universidad. “Durante estos 40 años, la Institución ha entregado a la sociedad más de 45.000 egresados que no solo son competentes, sino también cultos, con una formación integral y un sentido humanista. El cultivo de las humanidades les ha permitido aportar un valor agregado en sus profesiones”, resaltó el Presbítero.
Luis Ángel Acosta, decano de la Escuela de Ciencias Exactas e Ingeniería, destacó que el legado de la Institución trasciende la mera transmisión de conocimientos. “Hemos formado seres humanos integrales que han marcado la diferencia a lo largo de la historia. Nuestro legado consiste en haber forjado generaciones de profesionales que entienden que su responsabilidad va más allá de lo técnico. Los egresados Sergistas contribuyen al desarrollo sostenible, al bienestar colectivo y a la mejora de la calidad de vida de las comunidades”, afirmó.
El año 2009 marcó el inicio de PRIME Business School, una escuela de estudios en administración y negocios que en 2023 recibió la Acreditación Académica Internacional Multicampus de la prestigiosa agencia EQUAA (Education Quality Accreditation Agency).
Desde la perspectiva de Ramón Guacaneme Pineda, decano de la Escuela de Negocios, el legado de la Universidad en sus 40 años radica en el compromiso ético. “No solo importa el aspecto técnico de lo que se aprende, sino que se trata de un proceso en el que, con el apoyo de profesores, directivos y personal administrativo, se genera un espacio educativo de alta calidad. Esto ayuda a los estudiantes a consolidarse como seres humanos que desarrollan habilidades, no solo profesionales, sino también humanísticas. Así, se convierten en egresados que contribuyen a la constante construcción de una mejor sociedad”, señaló el Decano Sergista.
En 2010, con el fin de formar juristas conscientes de los retos del Derecho y preocupados por su aplicación específica en el contexto colombiano, se creó el Doctorado en Derecho. “Esta Universidad ha generado un impacto significativo en temas académicos y humanistas. Principalmente, somos una comunidad que coloca al ser humano en el centro de su labor. Todo nuestro compromiso académico se fundamenta en este principio, y por ello, nuestros estudiantes y egresados llevan consigo esos valores y principios. Un Sergista es una persona ética y responsable”, destacó Hernán Jiménez Barrero, decano de la Escuela Mayor de Derecho.
En 2012, La Sergio llegó a Barranquilla con cursos de actualización para ejecutivos y empresarios, y posteriormente, en 2016, se consolidó como un proyecto académico con la apertura de programas de pregrado.
En 2019, la Universidad recibió nuevamente la Acreditación Institucional de Alta Calidad Multicampus por un término de seis años, otorgada por el Ministerio de Educación Nacional. Además, se inauguró el primer programa en Colombia y Latinoamérica en Teatro Musical.
Para el maestro Julián Montaña Rodríguez, decano de la Escuela de Artes y Creación, la Universidad ha construido un ecosistema formativo y artístico que transforma realidades a través de la creación y ha sido un entorno en el que miles de jóvenes de diferentes orígenes han podido desarrollar competencias a través del arte.
“En estos 40 años, La Sergio se ha convertido en una casa que abraza las artes y la cultura. Ha sido un hogar para las músicas colombianas, el teatro musical en clave latinoamericana y experimental, las músicas populares, la gestión cultural, la producción artística, así como la investigación y creación. La Universidad representa un lugar de oportunidades, un laboratorio donde la diversidad encuentra su espacio. Uno de sus grandes legados es la creencia en la cultura como un medio para abrazar la vida en estos tiempos contemporáneos”, explicó el maestro Julián Montaña.
Con el propósito de avanzar en el fortalecimiento y la sostenibilidad de un proyecto académico humanista que contribuya a la consolidación de una sociedad moderna, La Sergio Cambia para Crecer y avanza en la renovación de la arquitectura institucional con la reorganización de dependencias y Escuelas.
Tras una evaluación detallada de los aspectos académicos y administrativos, la Universidad inicia una nueva era. En esta etapa, se enfocará en fortalecer el diálogo entre la academia, el Estado, la empresa y la sociedad. Además de guiar la búsqueda continua de la calidad y potenciará las funciones sustantivas de docencia, investigación y bienestar institucional.
“La historia de la Universidad Sergio Arboleda ha estado signada por transformaciones inspiradas en los retos que plantean la sociedad y el mundo. Hoy, una vez más, Cambiamos para crecer, para avanzar en el fortalecimiento y la sostenibilidad de un proyecto académico humanista que contribuya en la consolidación de una sociedad moderna”, afirmó Jorge Noguera Calderón, rector de la Universidad Sergio Arboleda.
Para Álvaro García Jiménez, decano de la Escuela de Comunicación e Industrias Digitales, la Institución, desde sus inicios, ha formado líderes con un sentido ético y humano, dispuestos a transformar el mundo.
“Miles de egresados llevan en sus manos la capacidad de impactar el futuro, con valores que trascienden generaciones. En esta era digital, nuestra Universidad ha sabido evolucionar con determinación y ha liderado el camino hacia un conocimiento global e interconectado. Nos hemos convertido en un referente de innovación y excelencia. Hoy más que nunca, La Sergio es una plataforma para que los soñadores se conviertan en profesionales y emprendedores creadores del mañana, que aporten soluciones a las problemáticas actuales y construyan un legado que forje el futuro”, expresó Álvaro García.
Así, la Universidad Sergio Arboleda continúa su fortalecimiento para consolidarse como un referente en la educación superior de Colombia, comprometida con la formación integral de profesionales competentes en ciencia, investigación y cultura.
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