En la Universidad Sergio Arboleda, el emprendimiento se ha promovido como un pilar fundamental para desarrollar habilidades increíbles y una visión estratégica. Nuestros emprendedores se han caracterizado por ser personas competentes y con herramientas para generar una idea de negocio sostenible, innovadora, e impactante.

La historia de Jesús Londoño es un ejemplo de cómo la formación académica puede convertirse en una base sólida para crear un emprendimiento. Egresado de la Escuela de Humanidades y Ciencias Sociales, Jesús no solo aprovechó los conocimientos adquiridos durante su carrera, sino que también aplicó su pasión por el turismo para materializar su sueño.

Para descubrir cómo nació “La Danta”, debemos remontarnos al año 2016, cuando Jesús emprendió un viaje que sería clave en el desarrollo de su proyecto. Tras visitar San Gil y otros pueblos de Santander, quedó sorprendido con el turismo de aventura que se desarrollaba en estos lugares. Fue así como se inspiró para crear un espacio único en la ciudad de Santa Marta, en donde los visitantes pudieran encontrar actividades de alto impacto combinada con la belleza natural que caracteriza esta región.

Convencido de que su idea era única, Londoño decidió postularse al Fondo Emprender del SENA, un programa que ofrece financiamiento a emprendedores colombianos. “Cuando realicé la inscripción tenía claro que lo ganaría porque era una idea innovadora y con mucho potencial”, comentó.

En este proceso, el Centro de Emprendimiento de la Universidad Sergio Arboleda desempeñó un papel muy importante. Gracias al apoyo brindado y a la disposición del personal para colaborar en los sueños de nuestros emprendedores, se pulieron todos los detalles necesarios para que el proyecto de Jesús tomara forma y pudiera presentarse con éxito al programa Fondo Emprender. Como resultado, Jesús obtuvo el capital semilla necesario para iniciar lo que hoy es un proyecto exitoso y sólido

“La Danta” ha tenido una evolución constante con el tiempo, Londoño fue descubriendo que los visitantes no solo buscaban adrenalina, sino también un lugar donde lograran desconectarse por completo. Esta revelación lo ha llevado a transformar “La Danta”, ajustando paulatinamente el espacio y de esta manera satisfacer las nuevas demandas de los turistas.

Actualmente, “La Danta” está desarrollando un parque de cuerdas que busca preservar la esencia original de la aventura, al tiempo que crea un entorno cómodo y acogedor para que los visitantes puedan relajarse y disfrutar del entorno único de la Sierra Nevada de Santa Marta.

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