
El desempeño laboral contempla la destinación de una gran parte del tiempo de vida y en ese entorno dedicamos más de la tercera parte de un día hábil. Ahora bien, si de lo que se trata es de acceder a un buen empleo, existen algunas premisas que pueden aportar en esa búsqueda: qué trabajo buscas, en qué empresa, cuáles son tus competencias, entre otros aspectos.
Es clave tener claridad acera de estos planteamientos, pues de ello depende que tus aspiraciones laborales sean consecuentes con tu perfil profesional y, por su puesto, con una remuneración acorde con tu desempeño y tu formación académica. Esto marcará la diferencia y así tendrás ventajas en el proceso de selección del candidato.
Toma nota
1. Revisa y mantén actualizado tu perfil profesional – Identifica tus fortalezas y habilidades, así como tus gustos y aspiraciones profesionales. ¿Qué te gusta hacer? ¿En qué quieres trabajar? Responder estas preguntas desde la honestidad te ayudará a encaminar tus esfuerzos para alcanzar tus metas.
2. Filtra tus aspiraciones – Haz un listado de las empresas en las que quisieras trabajar. Investiga a fondo: ¿A qué se dedican? ¿Cuáles son sus valores corporativos? ¿Me identifico con su propósito? ¿Qué perfiles contratan? Síguelas por sus redes sociales: LinkedIn, Facebook, Instagram. Así, estarás informado de las novedades, vacantes y oportunidades.
3. Hazte notar – Actualmente LinkedIn es la mayor red profesional del mundo. Allí puedes destacar tus habilidades y logros profesionales y hacer contacto con miles de profesionales alrededor del mundo. De ahí la importancia de mantener al día tu perfil. Esfuérzate por agregar contactos, expertos y reclutadores que pertenezcan a las industrias y empresas de tu interés.
4. Destaca tus logros académicos, como certificaciones y actualizaciones. Mantén vigentes las recomendaciones de particulares y familiares que puedan validar tus aptitudes y tu desempeño. Esto suma puntos en tu perfil y hará que te destaques en los procesos de selección.
5. Dedica el tiempo que sea necesario – Lograr ubicarse en el empleo ideal es un esfuerzo personal que requiere dedicación y persistencia. Por ello, debes destinar tiempo diario para revisar y aplicar a las vacantes que sean de tu interés. Una buena práctica es hacer seguimiento a tus aplicaciones y conectar con reclutadores de las empresas que te interesan, pues ello te mantendrá informado de lo que demanda la industria.
Seis aspectos que te impiden lograr tus propósitos
1.No sabes lo que quieres… ¡enfócate!
2.Pérdida de tiempo valioso… aunque no lo creas el tiempo puede ser un gran desmotivador, pues cada día que no logres los resultados que esperas pierdes confianza y seguridad, afectando así tu autoestima. ¡No desistas!
3.Quedarte en tu zona de confort: anímate, pierde el miedo, trabaja en fortalecer tu confianza y disposición a estar más abierto a lo que te brinda el entorno.
4.No te tomas en serio: ten confianza en ti y comprométete.
5.Te falta constancia y paciencia: tiendes a aburrirte pronto, y prefieres dejar de intentarlo. Aleja este pensamiento y avanza.
6.Seguir pensando que las cosas llegan solas: Para que algo suceda es necesario moverse, pero hacerlo con una intensión. Trabaja para que las cosas pasen.
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