El pasado 6 de mayo de 2025, esta unidad académica lideró junto con sus estudiantes el Seminario Práctico: “Audiencias Concentradas en el Derecho Penal Acusatorio”, una experiencia formativa que replicó con alto nivel de rigurosidad una audiencia real del sistema penal colombiano.

La jornada, desarrollada en el Hall 74, se configuró como una experiencia de simulación jurídica avanzada, integrando a docentes expertos, estudiantes de últimos semestres y profesionales del sector judicial. Más allá de un ejercicio técnico, esta actividad se concibió como una estrategia didáctica de innovación, orientada al desarrollo de competencias jurídicas complejas a través de metodologías activas, basadas en la práctica y contextualizadas en situaciones reales.

Fiel al modelo educativo por competencias de la Universidad Sergio Arboleda, cada participante asumió un rol central dentro del proceso penal: juez, fiscal, defensor, víctima, acusado y representante del Ministerio Público. A través de esta experiencia situada, los estudiantes enfrentaron en tiempo real desafíos de argumentación, interpretación normativa y toma de decisiones, consolidando aprendizajes significativos en escenarios similares a la realidad judicial.

Un punto culminante del evento fue la participación activa del Dr. Hernán Gonzalo Jiménez Barrero, decano de la Escuela Mayor de Derecho, quien no solo lideró la concepción pedagógica del ejercicio, sino que asumió personalmente el rol de defensor en la audiencia simulada. Este gesto fue más que simbólico: fue un acto formativo poderoso que demuestra cómo el modelo educativo de la Universidad se vive desde la ejemplaridad del maestro, que no se limita a transmitir saberes, sino que los encarna con rigor y compromiso.

El Dr. Jiménez explicó que se trató de un caso real adaptado a la práctica pedagógica, y que esta estrategia didáctica busca que los estudiantes “no solo escuchen una clase sobre delitos como lesiones personales o violencia intrafamiliar, sino que comprendan profundamente los elementos del delito, la estructura del proceso y la responsabilidad ética del abogado”. Además, anunció que estas simulaciones se extenderán a las áreas de derecho civil, laboral y de familia, consolidando así una visión transversal de la oralidad judicial y la formación práctica.

El seminario también contó con la participación del magistrado Carlos Roberto Solórzano Garavito (Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia), los fiscales Carlos Fernando Alvarado Carvajal y Miguel Enrique Bayona Rodríguez, la experta en justicia transicional Carolina Rosas Díaz, y el abogado litigante Sergio Andrés Dietes Calderón. Cada uno de ellos asumió roles en el ejercicio, aportando desde su experiencia profesional al realismo de la simulación.

El fiscal Alvarado señaló que estos espacios “no solo enriquecen a los estudiantes, sino que también actualizan y revitalizan la práctica profesional”, mientras que el Dr. Bayona subrayó la importancia de evidenciar en vivo el debate entre partes y la necesidad de convencer al juez, como ocurre en la vida real.

El Dr. Dietes destacó la oportunidad que tienen los estudiantes de “presenciar lo que ocurre realmente en una audiencia”, y Michelle Polanco, representante estudiantil, agradeció la experiencia, señalando que este tipo de ejercicios “hacen que los estudiantes se enamoren más de la Academia y se acerquen con mayor compromiso al derecho penal”.

Desde el plano investigativo, la actividad fue desarrollada con el respaldo del Grupo de Investigación en Ciencias Penales y Criminológicas “Emiro Sandoval Huertas” y el Grupo de Reflexión “Justicia y Paz”, en coherencia con el nuevo enfoque de la investigación aplicada que promueve la Universidad: conocimiento situado, útil, orientado a resolver desafíos reales en contextos específicos.

Con este tipo de ejercicios, la Escuela Mayor de Derecho reafirma su compromiso con una educación jurídica de vanguardia, donde el conocimiento no se memoriza, sino que se experimenta; donde el maestro no se limita a explicar, sino que guía con su ejemplo; y donde el estudiante no es espectador, sino protagonista de su propio proceso formativo.


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